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La OMS y el Ministerio de Sanidad recomiendan una práctica de Actividad Física (AF) de 1 hora diaria de forma vigorosa en jóvenes y adolescentes.
En España las niñas no lo suelen cumplir, ya que el 80 % de las chicas de 13 a 17 años no llega a una hora de ejercicio físico al día según investigación del Hospital San Joan de Déu, Barcelona. El estudio añade que entre los 12-13 años, las niñas empiezan a dejar toda actividad física y entre los 16-18 años, 7 de cada 10 jóvenes dejan el deporte para siempre.
Que las niñas no realicen actividad física o que la abandonen precozmente pueden acarrearles peor estado de salud a lo largo de su vida y a largo plazo, también su estado de salud mental. Además, el ejercicio físico actúa como protector frente al consumo de alcohol, tabaco y otras drogas, y reduce la ansiedad, previene la depresión, mejora la tolerancia al estrés, las funciones intelectuales, la autoconfianza, autoestima y aceptación social; aporta una mayor estabilidad emocional y ayuda a establecer relaciones sociales y mejora las existentes con el entorno.
Además, confirma el estudio que el deporte es un poderoso instrumento para romper los estereotipos que persisten en nuestra sociedad, y para la educación en valores y la adquisición de habilidades que pueden resultar muy útiles en la vida adulta –como es la capacidad de liderazgo, el trabajo en equipo, la resiliencia o la equidad. Así mismo, el deporte es un instrumento pedagógico debido a una característica que lo diferencia de otros contenidos educativos o fenómenos sociales: el hecho de que es lúdico y vivencial.
¿Qué opinan los expertos?
Los expertos y coautores de nuestro programa EFecto21, Andrés Izquierdo García, Borja Abad Galzacorta y David Cañada López nos dan su opinión:
Los que nos dedicamos desde hace años al mundo de la educación y la AF, profesores de Educación Física, hemos podido ser espectadores de la evolución en los hábitos del colectivo adolescente. Más allá de la creciente tendencia al sedentarismo, se percibe una pérdida en la competencia y bagaje motriz de los jóvenes en edad escolar; esto responde según estudios internacionales (PASOS 2019 o HBSC 2018) a un descenso en la práctica de AF, que se acentúa en chicas a partir de los 16 años. Y nos preguntamos, ¿Cuál es la causa?
Está claro que la sociedad en general está desarrollando entornos que favorecen conductas sedentarias: productividad laboral y académica exageradas, largas jornadas de trabajo, pluriempleo, tecnología y modelos de transporte, comunicación y tecnología, ubicuidad, disminución de tiempos de ocio… Pero ¿por qué las chicas y por qué en la adolescencia?

Detonantes
Fernando del Villar nos describe los siguientes detonantes: motivación, tipos de práctica deportiva y entorno. Estos tres factores están directamente relacionados con la teroría de la Autodeterminación de Deci y Ryan, o lo que es lo mismo, aquello que nos genera ganas de aprender o practicar algo. Para generar motivación, uno se puede agarrar a tres factores:
- Sentirse competente en alguna disciplina.
- Sentirse apoyado o rodeado por personas que también practiquen o compartan nuestra inquietud.
- Poder elegir entre un abanico amplio de opciones algo que nos guste.
Pues bien, en el caso de las chicas adolescentes, según los estudios, la motivación se asocia más con la imagen corporal que proyectan o con su sensación de estar haciendo algo saludable, más que con la diversión o la simple catarsis de la práctica de AF: es decir, su motivación se genera por factores extrínsecos.
En segundo lugar, parece ser que al llegar la edad de los 16 años, cuando el rendimiento escolar comienza a ser algo más decisivo para el futuro profesional (estamos hablando del bachillerato) sienten menos apoyo familiar – las familias apoyan más las actividades extraescolares deportivas en el caso de los chicos -, tienen menos referentes de práctica de AF en su entorno – tanto en su círculo de amistades como en los medios de comunicación – y por último pierden en segundo de bachillerato a uno de sus posibles aliados en la práctica de AF – la EF escolar.

Por último, si ponemos el foco en las posibilidades en la elección, parece claro que aún existe una mayoría de actividades (tradicionalmente asociadas a la práctica masculina), que parecen generar menos atracción entre las chicas, fundamentalmente porque no existen referentes femeninos de esos deportes en los medios y por lo tanto la cantidad de chicas practicantes, aún es poca. Por otro lado, no debemos olvidar, que aún tenemos mucho margen de mejora, en el enfoque que se le da a la planificación del entrenamiento en las disciplinas deportivas. Éste sigue centrado en la fisiología masculina como modelo, olvidando que chicos y chicas tienen formas de funcionar y reaccionar ante las cargas y el esfuerzo de manera muy diferente. Alberto García (2022), expone de forma muy clara un modelo de planificación del entrenamiento, centrado en los diferentes ciclos en la ovulación que tienen en cuenta los periodos menstruales en las mujeres.

Pero volviendo a centrar el tema en la carencia de actividad física respecto a las recomendaciones diarias desde la OMS. ¿Qué otras consecuencias de la suma sedentarismo + inactividad física estamos detectando en los centros educativos?
En el curso 2021-22 se puso en marcha en los centros públicos de la CAM, un programa para proteger a alumnos vulnerables. Con este término se reconocía a aquellos estudiantes que se producían lesiones autolíticas. Era la punta del iceberg de una epidemia de diferentes patologías en la salud mental de los adolescentes. Llevamos años conviviendo con ataques de ansiedad, baja tolerancia a la frustración, depresiones y un sinfín de emociones desagradables entre la comunidad adolescente.
¿Qué es lo que falla aquí?
Sabemos por innumerables estudios y proyectos que la AF influye en el rendimiento académico, pero ¿qué papel tiene la Actividad Física en la salud mental? Pues parece que mucho también.
La AF parece tener una influencia en la percepción de bienestar mental de los niños y adolescentes: el valor social del juego, las actividades colectivas, o la secreción de hormonas que “generan felicidad”: dopamina, serotonina, endorfinas, oxitocian… pueden jugar un papel esencial.
Nos surge aquí la posibilidad de presentar un programa basado en la AF, dirigido a 5º y 6º de primaria y que se enfoca en desarrollar las habilidades del siglo XXI desde una perspectiva emocional, de conocimiento personal y del entorno que nos rodea. Quizá sea una posibilidad para ayudar a superar estos dos retos de los que hemos tratado en este post:
- Cómo conseguir que las chicas adolescentes sigan practicando AF.
- Ayudar a mantener la salud mental a través de la AF.
Soluciones desde las aulas
Desde Fundación Créate creemos en la educación para promover la práctica del deporte como un hábito de vida saludable, adaptado a cada individuo, para desarrollar ciudadanos capaces de enfrentarse a retos, con iniciativa, persistencia y, en definitiva, más felices. Además, practicar un deporte mejora las habilidades personales y profesionales.
Nuestro programa educativo EFecto21 está enfocado a fomentar el deporte como actividad integral y holística que desarrolla distintas dimensiones del ser humano a través del autoconocimiento, la resiliencia, el autocontrol y el desempeño mediante la Educación Física de niños y jóvenes. Minimaratón Madrid forma parte de este programa educativo de Fundación Créate que está revolucionando la Educación Física.
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